martes, 20 de agosto de 2013



Seguro que todos conocen de sobra la broma de la niña fantasma en el ascensor. Bien pues en este caso, el desenlace resulta fatal y la niña que gasta la broma acaba siendo apalizada por un pandillero al creer que era de verdad, y por miedo a que pudiera hacerle daño. La niña acabó en suelo y el hombre huyó corriendo. Para todos aquellos que no conozcan de que trata la broma, es muy simple. Se convence a alguien para que entre en un ascensor, que ha sido previamente modificado con una entrada falsa en el interior. De este modo, cuando las luces se apagan debido a un “fallo eléctrico” del sistema, la puerta se abre y la niña fantasma puede hacer su aparición para comenzar la broma. Simplemente se queda de pie en un sitio, con su peluche agarrado de la mano y con camisón blanco. El pelo le cae por la cara y no tiene más que mirar el suelo y divertirse con los gritos de miedo de la gente del ascensor. A continuación da un chillido, se apaga la luz y desaparece por la trampilla. Posteriormente puede realizar otra aparición y aumentar así el terror de las personas del interior.




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