lunes, 2 de septiembre de 2013




Corrimos desesperados para ocultarnos del agua;
Pero no importó mojarnos con tal del sabor de tu alma.
Hoy siento aún tus caricias y el golpeteo de la lluvia

Los dos juntos abrazados, no importó cuanto mojados.

↓↓↓ DEJA TU COMENTARIO ABAJO ↓↓↓